En el centro hay una atracción/museo donde te explican, si quieres con la voz de Sir Edmund Percival Hillary, cómo se realizan las expediciones antárticas, cómo es la base Scott, cómo fueron las primeras expediciones antarticas y la fauna que existen en la Antártida.
Hay tres cosas que resaltaría de esta excursión. La primera, el pase vip que cogimos para estar con los pingüinos, donde nos explicaron cómo los alimentaban y cuidaban. Los pingüinos que tienen en el centro son animales con lesiones (parálisis en extremidades, cegera, etc..) con las que ya no pueden vivir en libertad. La segunda sería el viaje en vehículo antártico. No es para echar cohetes pero no estuvo mal. Te suben por unas rampas de hasta un 45 grados y compruebas que el vehículo es anfibio. Y la tercera y la mas graciosa fue estar en una ventisca polar. Tienen una sala donde pueden crear viento de una velocidad de hasta 42 km/h haciendo que la temperatura de la sala sea de hasta - 25 grados centigrados.
Ya por la tarde relax, hacer las maletas ver alguna peli y a la cama.
Como ciclo de cine tuvimos una peli britanica y otra española. Y joder, ¡qué mala era la española ( la Venganza de Don Mendo Rock)!
Mañana dejamos el "Monstruo" y nos vamos para el aeropuerto camino Sidney. Despues de unos 16 dias abandonamos la Tierra Media para volver al "hogar", previo paso por las antípodas.
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