miércoles, 25 de septiembre de 2013

Tokyo, Día 5

Parece que Tokyo tenía algo contra nosotros. Menos mal que se ha solucionado al final del día.

Hemos llegado de Ryokan a las 12 pero, como en los hoteles de Japón no se puede hacer el check-in hasta las 3, hemos decidido ir a ver el Palacio Imperial y sus jardines. Buscamos alguna taquilla para guarda la mochila y algunas cositas que compramos en el ryokan... pero no hay ninguna que podamos usar. Todas las que hay en esa estación son para que las utilicen los usuarios de una tarjeta especial de transporte bla bla bla, que no tenemos. Así que cargamos las cosas hasta el Palacio, que lo suelen cerrar los lunes, pero como ayer fue fiesta (Equinoccio de otoño), lo han pasado a hoy martes, así que estaba cerrado.

Así que decidimos ir a Shibuya, para seguir haciendo algo de tiempo. A la salida del metro está la estatua de Hachiko, un perro que acompañaba a su dueño a la estación por la mañana cuando éste se iba a trabajar a la universidad, y le recogía por la tardes, todos los días. Un día al profesor le dio un ataque al corazón y no volvió, pero el perro seguía yendo todos los días a esperarle a la estación por las tardes. Los vecinos le empezaron a dar comida y a intentar llevarselo a casa pero Hachiko no quería hasta que éste también murió. Se levantó esta pequeña estatua en recuerdo de la fidelidad de este perro hacia su amo.



Además en este barrio está el paso de peatones mas concurrido del planeta. No es el caso de hoy, porque era la 1.30 de la tarde de un martes.



De ahí, un paseito por las tiendas de la zona, poca cosa. Y por fin, llegamos al hotel a las 3 en punto. Hemos estado haciendo planes para por la tarde y mañana... y vemos en el tiempo de estos días que nos quedan ¡tormenta! Adiós al plan del parque de atracciones al lado del monte Fuji. Así que hemos pensado que nos iremos de museos. A ver cómo amanece mañana el día y lo que decidimos.

Sobre las 5 hemos ido a visitar la Torre de Tokyo, similar a la Eiffel, en color rojo, esperando poder subir a lo mas alto desde donde se puede ver el Fuji peeeerooooo resulta que se ha estropeado el ascensor y sólo se podía subir hasta la mitad. Cómo ya estábamos allí hemos decidido seguir adelante.




Dentro de la torre había una exhibición de Doraemon




Y por la noche, de concierto. Sergio ha encontrado por internet una sala pequeñita (Shelter livehouse) en la que tocaba un grupo japonés que tenía buena pinta. Allá que hemos ido... y ha estado muy muy bien. Eran Mix Market. Dos horas de concierto muy divertido y bailongo. La gente se subía al escenario y se tiraba al público para que le cogiese. Algo salvaje para mi gusto. Lo peor han sido los diálogos que se han marcado entre grupo y público. De unos 5 minutos cada uno, cada dos canciones.... esa parte ha sido un tostón. Pero hemos salido de la sala con una sonrisa de oreja a oreja y ¡¡¡Sergio ha conseguido meterse en un pogo en Japón!!! (Sergio debe estar en algún lugar de la Foto)




Un video de Mix Market




1 comentario:

  1. Por fin Doraemon!!! Habéis tardado en enseñarnos lo bueno... Si no llega a ser porque la mejoría de Esther en el gesto japo de "cómo molo en las fotos" ha sido sobrecogedora, hasta ahora habría pensado que estabais en Cuenca.

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